Por fin ha llegado el gran día y está listo para la mudanza. Los profesionales de la mudanza han llegado, el perro está ladrando y los niños están bajo los pies. Todo parece un caos, pero mientras tanto te das cuenta de que el sofá que sube las escaleras se ha golpeado contra la pared dejando un enorme agujero y que el suelo de la cocina está destrozado. Lo último que tiene que preocuparle es si le devolverán la fianza, en caso de que esté alquilando, o si tendrá que llamar a un equipo para que remiende las paredes o arregle el suelo antes de seguir adelante. Para evitar este tipo de situaciones, aquí tienes 5 consejos para evitar daños en la propiedad cuando te mudes.
Prepare las zonas de mayor tránsito
Cuando piense en su mudanza, tenga en cuenta las zonas de su casa que se convertirán en áreas de alto tráfico. Si el pasillo principal está enmoquetado, considere la posibilidad de colocar alfombras o moquetas viejas para ayudar a proteger las alfombras y evitar el coste de una limpieza a fondo de las mismas una vez que esté listo para marcharse. Si los pasillos son de madera, puede considerar la posibilidad de pegar cartones para proteger los suelos. Si el día de la mudanza llueve mucho o hace mal tiempo, para evitar que se acumule el barro, una lámina de plástico es probablemente la mejor opción.
Mida sus puertas
Si tiene artículos grandes, asegúrese de medir las entradas para determinar si sus artículos más grandes caben adecuadamente. Parece una obviedad, pero si ha hecho reformas en su casa que puedan afectar al tamaño de sus entradas o pasillos o si ha montado algunos de sus muebles más grandes una vez que han entrado en la casa, puede tener problemas para sacarlos. Si este es el caso, asegúrese de tomar una foto del artículo antes de desmontarlo para que pueda volver a montar las piezas fácilmente una vez que lleguen a su destino.
Proteja sus objetos de valor
Si tiene artículos como mesas de centro o aparadores que pueden tener esquinas y bordes afilados, protéjalos con materiales de embalaje o cartón. Esto no sólo protege los muebles de los daños, sino que también evita que las paredes se perforen accidentalmente. Envuelva los cristales y espejos en toallas o ropa de cama vieja para asegurarse de que no se dañen al trasladarlos de casa. La mayoría de los profesionales de la mudanza como Mudanzas Lozano en Sevilla tendrán estos artículos a mano.
Equipo para ayudar en la mudanza
Algunos artículos requieren más de una persona para levantarlos o un equipo para ayudar a dirigir la salida de los artículos de la casa. Las empresas de mudanzas profesionales tienen varios artículos a mano para ayudar a hacer la mudanza más fácil.
Carro de mudanza. Estos carros son ideales para mover artículos grandes como camas, vestidores y sofás. Las empresas de mudanzas pueden sacar fácilmente el artículo de la casa sin preocuparse de rayar las superficies de madera dura y normalmente con menos mano de obra. Los carros se utilizan sobre todo cuando la casa tiene un solo nivel o si la empresa de mudanzas tiene acceso a un ascensor.
Carro de mano. Los carros de mano tienen un aspecto vertical. Son ideales para apilar cajas. Estos carros ayudan a asegurar que los artículos no se caigan durante la mudanza.
Deslizadores de suelo. Los deslizadores de suelo ayudan a mover objetos grandes, como electrodomésticos y muebles, por superficies duras, protegiendo el suelo. A veces se denominan deslizadores de muebles o correderas de muebles.
Prepare las esquinas de las paredes
Los protectores de esquinas pueden colocarse en zonas de mucho tránsito para garantizar que las paredes permanezcan intactas durante la mudanza. Los protectores de esquinas vienen en cartón, espuma, vinilo y goma de alta resistencia. Asegúrese de colocarlos en las esquinas de las paredes de los dormitorios y en las de la entrada de la casa.
Muchos de estos artículos pueden ser suministrados por su empresa de mudanzas, así que asegúrese de preguntar a su empresa de mudanzas profesional si le suministrará estas cosas o si debe añadirlas a su lista de suministros de embalaje para tener a mano el día de la mudanza.
