Topes de andénLos residentes de edificios de viviendas saben muy bien los problemas que puede llegar a dar en ocasiones una plaza de aparcamiento que no disponga de topes de andén para estacionamiento; trifulcas con los vecinos debido a rayones que aparecen de la noche a la mañana en el coche, continuos desperfectos en la pintura del vehículo debido a los golpes contra las columnas y los muros… y si a ello se le suma una persona inexperta al volante de un coche de grandes dimensiones, el resultado es un vehículo repleto de rayones que después para ser arreglado requiere de una buena cantidad de dinero para pintar el coche entero.

Así que pudiendo evitar todos estos problemas, ¿por qué no suele hacer uso la gente de los topes de aparcamiento? Su instalación es tan simple que incluso la persona más negada para la “bricomanía” es capaz de adherir el tope al suelo sin provocar ninguna desgracia. Por otro lado, el precio de un tope así por muy caro que sea siempre resulta más rentable que pasar por el taller a solicitar un presupuesto para pintar el coche entero.

A pesar de lo simple que resulta instalar un tope así, mucha gente aún a día de hoy opta por olvidarse de este asunto y luego se lleva las manos a la cabeza cuando aparecen los primeros rayones en su coche. Así de peculiar es el ser humano… solamente aprende a base de tropezarse una y otra vez sobre la misma piedra.