Los sentidos del bebé al nacer no son como los de una persona totalmente desarrollada, por lo que hay que preguntarse ¿por qué estos son diferentes? Además, esto conlleva un cuidado diferente para los bebés que se encuentran en una etapa más avanzada. Si quieres informarte sobre todo acerca de este tema, no dejes de leer este artículo.
El cuidado de los sentidos influirá en su desarrollo completo
Los sentidos del bebé al nacer son una cuestión muy delicada y necesita conocerse para tratarlos como tal. En primer lugar está la vista del recién nacido. Ellos pueden distinguir todo desde que nacen, pero la distancia de enfoque ideal para ellos es de 20 a 30 cm. A partir de allí los músculos focales se van fortaleciendo, lo que los ayuda en la etapa adulta.
Por otra parte se encuentra el tacto. Este es uno de los sentidos del bebé al nacer que tiene más importancia, ya que, al no tener tal capacidad focal, pueden reconocer a las personas por el tacto. Es así como diferencian la calidez de una persona conocida. Además, es uno de los sentidos más importantes, porque a través de ellos sienten el mundo.
Uno de los sentidos más desarrollados al nacer es el olfato. A través de este se puede diferenciar el olor característico de su madre. Asimismo, los bebés pueden reconocer a las personas a través del sentido del oído. Todas las personas tienen diferentes tonos, lo que permite diferenciar a las personas.

El gusto es el sentido menos desarrollado de los bebés. Ellos perciben poca diferencia entre los alimentos hasta que llegan a los seis meses, que es cuando su paladar empieza a captar diferentes sabores. Sin embargo, hay bebés que pueden ser extremadamente sensibles a los sabores desde muy pequeños.