En los últimos años estamos experimentando importantes cambios en el mundo de la odontología y en las consultas de los dentistas en cuanto a implantología dental con impresoras 3D. Los pacientes son cada vez más conscientes de la importancia de una sonrisa bonita y perfecta de cara al mundo laboral en el que la competitividad es voraz. La tecnología ha intervenido de muchas formas en nuestra manera de vivir, de comunicarnos y de trabajar, sin embargo, el turno de la medicina y de la odontología ha llegado.
Las impresoras 3D se encuentran en un punto de desarrollo perfecto para continuar evolucionando y promoviendo gran cantidad de investigaciones a nivel de salud general y dental.
Tecnología en la implantologia dental
La implantología dental en concreto no se ha hecho esperar. Las posibilidades que ofrece una impresora en 3D son fenomenales en cuanto a diseño por computadora personalizado para elaborar prótesis dentales o algunos implantes de dientes que faciliten y aumenten la calidad de vida de los pacientes. Por ello, numerosas empresas se encuentran ya desarrollando y testando gran cantidad de software únicamente encargado de diseñar y producir este tipo de implantes a través de esta tecnología.
Lo que desconocemos de las impresoras 3D es que, entre otras cosas, llevan entre nosotros desde la década de los 80, pero su proceso de perfeccionamiento ha llevado décadas hasta el punto en el que nos encontramos. Aunque son muy caras, el mantenimiento y los materiales que necesita tampoco son baratos, sigue siendo rentable si consideramos el largo proceso de producción y la mano de obra que necesita la fabricación artesanal de la mayoría de implantes que se producen en un laboratorio de un protésico dental.
Como funcionan
El sistema Cad-Cam con el que cuentan, incorpora una alta tecnología que permite llevar la odontología un paso más allá y digitalizarla hasta punto que no imaginábamos. La complicación de las prótesis ya no es una barrera para la elaboración de la misma de forma eficaz y precisa. Las ventajas técnicas que nos ofrece no dejan de lado el gran ahorro de tiempo que supone a la hora de implementar un tratamiento a un paciente ya que, con un diagnóstico exhaustivo y la elaboración de un molde digital o un escaneo de la boca, el aparato, o el implante podría fabricarse de inmediato.
De momento, las cosas no suceden con tanta inmediatez, pero sí es algo a lo que podemos aspirar con el tiempo. Las prótesis no solo son traslúcidas, sino que además son prácticamente indetectables y mucho más cómodas que las fijas ya que su movilidad mejora la higiene del paciente.
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