El suelo que se utiliza para la práctica de algún deporte es casi tan importante como el propio deporte en sí o el tipo de pelota, máquina o accesorio que se utiliza para realizarlo.
Tan importante es este hecho que la realización de cualquier ejercicio en una superficie que no sea la adecuada puede dar lugar a lesiones graves que con el paso del tiempo pueden llegar a producir molestias y dolencias crónicas que se conviertan en incapacitantes.
Es por esta y otras razones por las que los gimnasios y los centros deportivos equipan sus diferentes estancias con diferentes tipos de suelo dependiendo del tipo de actividad que se vaya a realizar. El piso para aeróbics se utiliza en zonas en las que se vayan a realizar ejercicios intensos en los que se hacen movimientos que requieren de un gran impacto de los pies contra el suelo, y además necesitan que este suelo sea resistente, fácil de limpiar y de conservar.
En otros deportes, como las artes marciales o los deportes de balón se equipan las pistas con tarimas de madera, que tienen una mayor resistencia frente al arrastre y los resbalones producidos por los lances del juego.
