Hoy en día, con la unión de varios países bajo un estatuto o común acuerdo, con los tratados que existen entre varios países, las visas también han cambiado y ahora hay un tanto más de libertades al respecto, aunque también algunas restricciones.
Visas Schengen: este tipo de visa es otorgada por varios países de la Unión Europea y es uno de los muchos beneficios de la comunidad. Pero no todos los países de la Comunidad Europea permiten la entrada de extranjeros a sus países con esta visa. Reino Unido por ejemplo, no acepta la visa Schengen y se debe tramitar una visa especial para entrar en este territorio. Los países que si permiten la visa Schengen son Italia, España, Alemania, Austria, Islandia, Francia, Noruega, Bélgica, Luxemburgo, Holanda, Portugal, Suecia, Grecia, Dinamarca y Finlandia. El gran beneficio de esta visa es que sólo debes aplicar en la embajada del país europeo en el que te quedarás más tiempo y luego puedes pasar a los otros países sin tener que tramitar una nueva visa específica.
Visa de tránsito aeroportuario: este tipo de visa es solicitada por Estados Unidos, Canadá, la Comunidad Europea y Suiza en el caso de ser un pasajero de sólo de tránsito por aquellos países, esto es, que el pasajero se dirige a otro país pero debe hacer escala en algunos de estos territorios.
Visas de corta estadía: estas se otorgan con el propósito de turismo o visita y se otorga por tres meses. En el caso de los países Schengen la visa debe ser otorgada por el país de mayor estadía y el solicitante puede entrar en otros países Schengen sólo durante tres meses.
Hay que poner atención a las disposiciones que cada país tiene respecto de la entrada de extranjeros a su territorio, esto es muy importante antes de realizar el viaje. Estas pueden variar de acuerdo a tratados entre dos o más países o a convenios especiales. Uno de estos convenios es el ejemplo de América del Sur ya que los nacionales de esta región pueden entrar en los territorios de los otros países de la región sólo con su tarjeta de identificación, esto es sin pasaporte o visa y el tiempo que pueden permanecer en cada país es tres meses.
Si surgen dudas es recomendable acudir a profesionales que estén especializados en la temática de extranjeros, como pueden ser los Abogados de Extranjería que puedes encontrar fácilmente en cualquier página o directorio público que podemos encontrar buscando en internet. Estos profesionales no solo conocen las normas y las pautas, sino que pueden adaptar la situación personal de cada persona a las normas comunitarias del país o países donde se quiere entablar una relación profesional o simplemente se pretende visitar por largo periodo.